Nashville, la ciudad del country, ha visto el nacimiento y ascenso de Guillotine, una banda de metal industrial que desafía las convenciones y sumerge a sus oyentes en un mundo de caos y seducción. Con su nuevo EP, “Hellbound”, la banda continúa su crecimiento, ofreciéndonos un banquete de carne extraña que alimenta el alma más oscura.
Guillotine no es una banda cualquiera, pues sus conciertos son experiencias cinematográficas que transportan al público a un paisaje infernal, donde la música es el arma y el escenario, el campo de batalla. Su sonido, una mezcla explosiva de metal industrial con influencias de bandas como Rammstein y Ghost, crea una atmósfera densa y adictiva. Estos conceptos se ven claramente reflejados particularmente en dos canciones de su nuevo EP, hablamos de “Children of Anger” y “Strange Meat”.
“Children of Anger”
“Children of Anger” es más que una canción; es un grito de auxilio en medio del caos. Nacida de la angustia y la soledad de la pandemia, esta pieza musical encapsula la sensación de desconexión y la búsqueda desesperada de un sentido de comunidad. Con su sonido oscuro y atmosférico, “Children of Anger” se convierte en un himno para aquellos que han luchado contra la soledad y la incertidumbre.
“Strange Meat”
Por otro lado, “Strange Meat” es una celebración de la perversión y la libertad. Con una letra explícita y una melodía pegadiza, esta canción explora temas tabúes como la sexualidad y la identidad, invitando al oyente a sumergirse en un mundo de fantasía donde todo es posible. Acá tenemos el mismo concepto sonoro de distopía y oscuridad, pero con mayor incorporación de elementos electrónicos ¡No te lo pierdas!
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